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8 de Marzo: Día Internacional de la Mujer Trabajadora

. viernes, 5 de marzo de 2010
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Año tras año los 08 de Marzo - Día Internacional de la Mujer Trabajadora, es motivo para el boom de ofertas en tiendas de ropa, maquillaje, florerías o de todos aquellos productos que son hechos especialmente para nosotras las mujeres; muchas veces también, este día lleva a instituciones privadas y estatales a brindar un agasajo o premiar a algunas mujeres, como si este acto iría a mejorar las condiciones laborales-culturales que tanto explotan y oprimen a la mujer huancaína, peruana, de todo el mundo. Esto nos lleva a preguntar si ¿el 08 de Marzo se reduce a 24 horas hábiles para gritar a los mil vientos así porque sí ¡feliz día mujer!?

Definitivamente no y es que debemos recordar la lucha que obreras textiles emprendieron un ocho de marzo de 1857 exigiendo el derecho al trabajo y condiciones más dignas; del mismo modo la que fue emprendida en el año de 1908, por la jornada de 8 horas, la abolición del trabajo infantil e igualdad del voto para la mujer. Es entonces el 08 de Marzo, un día de acción desde y para las mujeres, opuesta a cualquier forma de sumisión.

Ahora bien, es necesario resaltar que la condición en la que las mujeres debemos de desenvolvernos se ha mantenido casi intacta. Muestra de ello es la diferencia de salarios entre mujeres y hombres trabajadores del sector agrícola en Junín, quienes perciben hasta diez soles menos que sus compañeros por la misma jornada y tipo de trabajo; es importante mencionar también al grupo juvenil femenino, el cual no está amparado bajo derechos laborales específicos, por consiguiente las condiciones (monto de sueldo, horario, etc.) en la que mujeres jóvenes debemos desempeñarnos como vendedoras, trabajadoras del hogar, niñeras, entre otros, son decididas unilateralmente por lxs jefxs, sin ningún tipo de protección.

Por otro lado, el ejercicio de nuestra sexualidad, está siendo limitada por el estado mediante sus leyes y por la injerencia de autoridades eclesiásticas que en nombre de la defensa a la vida, llevan a muchas mujeres a la muerte causada por hemorragias o infecciones generalizadas debido a un aborto mal practicado; cabe señalar que en el año 2009 el Ministerio de Salud prohibió la gratuidad de la denominada “pastilla del día siguiente”, restringiendo directamente su uso a mujeres de los sectores más pobres. Respecto a la cuestión educativa, concebimos que esta no debe limitarse a la presencia de estudiantes mujeres y hombres en un salón de clases; la equidad de género que el Ministerio de Educación pretende lograr, tiene que partir de la preparación pertinente de lxs docentes, a lado de un mayor presupuesto dirigido al sector educación y de la construcción de escuelas laicas, que estén libres de intervención de la iglesia católica o de la cultura militar que enarbola el machismo más radical.

Por ello nosotras reconocemos la necesidad de luchar, hoy más que nunca, contra la explotación laboral que viene desde el estado -ahora regida por el gobierno aprista-, de las transnacionales, contra la opresión cotidiana que vivenciamos por ser mujeres y a favor de la diversidad cultural-sexual de la que tanto se nos priva a mujeres y hombres por igual.

Es claro entonces, que nuestra lucha es triple y es que nuestra diversidad cultural, nuestro género y unidad como clase explotada nos lo exige. Es así que este ocho de marzo, nos manifestamos por:

· Una educación integral basada en la práctica y desarrollo de la equidad de género.

· La no violencia contra la mujer sea física, psicológica y sexual.

· La autonomía de las mujeres para decidir sobre su cuerpo, apoyadas en una atención especializada y sin peligro de ser condenadas penalmente.

· Acceso gratuito al uso de anticonceptivos.

· Respeto a la actividad laboral de las y los pequeños comerciantes, por parte de los agentes de serenazgo y municipales, que no sólo golpean sino también roban (lo llaman decomiso) en nombre del orden público.

· El rechazo a la acción represiva por parte del gobierno aprista contra las comunidades amazónicas que defendieron su derecho a la autonomía económico-cultural y contra la manipulación de las denominadas mesas de diálogo y/o comisiones de investigación a favor de las transnacionales y del mismo gobierno.

· La preservación de los recursos naturales; así como la flora, fauna, recursos hídricos y energéticos, con el fin de sostener el equilibrio ecológico.

¡Viva el Día Internacional de la Mujer Trabajadora!
¡Viva la lucha de las mujeres amazónicas!
¡Por la autonomía sexual y política de las mujeres!
¡Por una educación integral!
¡Arriba las que luchan!

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Foucault, el poder y el silencio de los inocentes

. domingo, 28 de febrero de 2010
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Por: José L. López

-¿Sabe porqué me atrapó?
-Adiós, doctor Lecter
-La razón por la que me pudo atrapar
es porque ambos somos iguales.
El Dragón Rojo
Thomas Harris

Desentrañar tus más ocultos temores. Utilizar tu don como una maldición. Saber que tú mismo eres capaz de ser ese monstruo. “El silencio de los inocentes” no es una simple película, es un juego mental que te atrapa, te analiza y te muestra como en verdad eres.

La figura del asesino en serie es el resumen espantoso de la era de la industrialización. Es lo mismo, buscar el objeto del deseo, después ubicar solo el objeto que la contiene. Que guarde los patrones exactos, que no rompa el molde pero que a la vez sea única.

En la sociedad de masas, al igual que el asesino serial de “el silencio de los inocentes”, no buscamos el objeto, sino más bien buscamos el objeto del deseo. En la película el asesino serial no buscaba mujeres, lo que en realidad buscaba era la piel de estas. Ese es el objeto del deseo. ¿Y para qué?, para descubrirse, para saber quién es. Deseamos lo que observamos, lo que todos los días vemos pero sabemos que no podremos tener. Esa es la similitud del asesino en serie y la del “individuo” en la sociedad de masas capitalista.

Todos los días nos enfrentamos a solo observar las cosas magnificas que la sociedad ha desarrollado; casas, autos, ropa. Deseamos tener todas esas cosas, creemos que algo cambiara en nosotros cuando las poseamos, pero cuando las tienes te das cuenta lo que en verdad eres. Todas esas cosas solo te sirven para recordarte quien eres. El objeto es el auto nuevo, pero el objeto del deseo es lo que buscas SER cuanto lo conduces. Pero al conducirlo te das cuenta lo que eres en verdad, lo que siempre fuiste y lo que siempre serás. Ahí, en ese preciso instante, el sueño capitalista del hombre de éxito se rompe, porque tu cercanía al objeto del deseo te vuelve a la realidad, sin embargo –y en ese momento- la promesa de aceptación te rescata.

Foucault, mediante su explicación del poder pastoral, hace cierta la semejanza. Entregamos nuestra subjetividad a un poder mayor, dejamos de ser nosotros mismo y nos entregamos a los designios de ese poder mayor, es ahí cuando deseamos lo que vemos cotidianamente. Ese poder mayor nos obliga a desear para ser aceptados. Nos obliga a buscar, a escarbar, a matar y a hacer todo por conseguir el objeto del deseo, objeto que nos dará por fin la capacidad de ser aceptados. Nuestra subjetividad, controlada por el poder mayor, dice que lo conseguiremos, que debemos esforzarnos, y si por si acaso dudamos, el poder “confesionario” estará ahí para recordarnos que siempre, en algún momento cuando menos lo imaginemos, podremos conseguirlo. La figura del asesino serial en “el silencio de los inocentes” busca en la piel de sus víctimas, lo mismo que nosotros buscamos al conducir un carro nuevo, la aceptación del poder superior.

“Lo que la fantasía se esfuerza por representar es, a fin de cuentas, la escena “imposible” de la castración. Por este motivo, la fantasía como tal, como noción misma, se encuentra cercana a la perversión: el ritual perverso escenifica el acto de la castración, de la pérdida primordial que le permite al sujeto entrar en el orden simbólico. O, expresándolo en forma más precisa: en contraste con el sujeto “normal” para quien la Ley cumple el papel del agente de la prohibición que regula su deseo, para el perverso el objeto de su deseo es la Ley; la Ley es el ideal que desea, quiere ser plenamente reconocido por la Ley, integrado a su funcionamiento... La ironía de esto no puede escapársenos: el “perverso”, este “trasgresor” por excelencia que pretende violar todas las reglas del comportamiento “normal” y decente, busca en realidad la imposición misma de la Ley.”

El acoso de las fantasías
Slavoj Zizek

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